10 cosas que ver en Lisboa de noche

Cuando estés investigando qué hacer en Lisboa, no debes descuidar: la noche lisboeta. La capital lusa siempre ha presumido de un ambiente nocturno de lo más bohemio y concurrido, especialmente en el Cais do Sodré y el Barrio Alto.

Además del ocio nocturno, Lisboa también presenta otros atractivos una vez se ha puesto el sol. Su iluminación la dota de una belleza particular y pasear por sus calles se convierte en una de las mejores actividades que se pueden realizar. Además, varios de sus espectaculares miradores ofrecen unas vistas inmejorables en este momento del día.

Aunque es casi seguro que hayas llegado hasta el Castillo de San Jorge con alguna excursión organizada por Lisboa o por tu cuenta, si tienes la ocasión te aconsejo que entres a una hora más tardía para admirar las vistas desde su mirador cuando el sol se está poniendo.

En su origen, fueron los romanos quienes levantaron este castillo, pero más tarde fue totalmente reconstruido por visigodos y árabes. Su posición, en la cima de una colina, hace que su silueta pueda verse desde casi todo el centro histórico. Y desde el castillo podrás contemplar buena parte de la ciudad y el estuario del río Tajo, una visión que se vuelve más mágica cuando cae la noche.

Información práctica

• Cómo llegar: la manera más rápida es utilizando el elevador del castillo que parte de la Baixa de Lisboa. Otra manera, además de andar, es coger el tranvía 28 hasta la parada Miradouro de Santa Lucía y, desde allí, caminar hasta el castillo.
• Horario: en invierno de 9:00 a 18:00 y en primavera y verano cierra a las 21:00
• Entradas: los adultos deben pagar alrededor de 10 € y para niños es gratis.

Si vas a pasar más de un día en Lisboa, no puedes dejar de acudir a un espectáculo de fados, el género musical más típico de todo el país. Incluso si no conoces nada sobre este tipo de música, te aseguro que vas a disfrutar de la velada.

El fado ha sido reconocido por la Unesco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad y es un auténtico símbolo de la cultura popular portuguesa nacida en los barrios más humildes. Este origen se ve reflejado en la temática de las canciones, generalmente marcada por la nostalgia y cierta sensación de frustración.

Como te explico en mi artículo sobre los mejores sitios para cenar mientras escuchas un fado, el barrio de Alfama alberga un gran número de restaurantes en los que puedes disfrutar de una buena comida mientras los cantantes interpretan varias canciones.

Si una visita para ver el barrio de Alfama es siempre interesante, cuando el sol empieza a perder fuerza el recorrido puede resultar aún más interesante. Desde hace unos años, toda la zona se ha revitalizado y hoy rebosa de ambiente y está repleta de numerosos lugares para comer algo.

Con la iluminación ya encendida, las calles del barrio recuperan parte de su antiguo ambiente casi, por llamarlo de alguna forma, canalla. Recorriendo sus empinadas y estrechas callejuelas se puede llegar a algunos espectaculares miradores en los que pasar un buen rato:

• Mirador de Santa Lucía: mantiene un aspecto típico lisboeta, con una mezcla de romanticismo y cierto aire decadente.
• Mirador de Gracia: situado cerca del castillo de San Jorge, este mirador se ha convertido en uno de los favoritos de la juventud lisboeta cuando empieza a caer la noche.
• Mirador Portas do Sol: muy visitado por los turistas, este mirador no ha perdido la esencia propia del barrio de Alfama. La panorámica es simplemente impresionante, con la iglesia de Sao Vicente de Fora escoltadas por casas de color pastel y el Tajo al fondo.

La Plaza del Comercio es uno de los centros neurálgicos de la capital portuguesa y desde ella parten algunos interesantes recorridos en autobuses turísticos. Por la noche, además del ambiente que se vive en ella, es imprescindibles recorrerla y acercarse a la orilla del Tajo para contemplar en Arco da Rua Augusta iluminado y, a lo lejos, la silueta del puente 25 de Abril.

En esta zona también vas a encontrar muchos restaurantes y heladerías, así como una de las cafeterías más famosas de la ciudad: A Brasileira.

Este local, situado en una de las calles que rodean la plaza, está ubicado en un edificio histórico de estilo art decó. Según relatan, fue la primera cafetería en Lisboa que sirvió la bica, una pequeña taza de café muy fuerte. Además, en ella se celebraban tertulias con la presencia de grandes intelectuales, como Fernando Pessoa.

Si bien el comienzo de este paseo es por la tarde, el hecho de poder ver anochecer desde un velero hace que sea una experiencia increíble para cualquier visitante.

En esta actividad se va a embarcar en un velero para disfrutar de uno de los mejores cruceros por Lisboa. Durante unas dos horas recorrerás parte del río Tajo para poder ver desde sus aguas algunos de los más importantes monumentos de Lisboa, desde la Torre de Belém al Monasterio de los Jerónimos, pasando además por debajo del puente del 25 de abril.

El mejor momento de este paseo fluvial llega cuando la luz empieza a cambiar de color debido al anochecer con la ciudad de fondo. Cuando el sol se pone, el barco regresa a tierra firme para que puedas continuar visitando Lisboa.

Normalmente, la visita al barrio de Belém suele hacerse por la mañana, lo que provoca que haya bastante gente viendo sus principales atractivos al mismo tiempo. Una buena idea para evitar esas aglomeraciones es acercarse por la tarde y alargar el recorrido hasta que se iluminen sus impresionantes monumentos. También te recomiendo que lo incluyas en el listado de excursiones organizadas por Lisboa.

Los dos lugares más atractivos del barrio son el monasterio de los Jerónimos y la Torre de Belém, seguidos de cerca por el Monumento a los Descubridores. Si puedes quedarte hasta que se haga de noche, te recomiendo que no te pierdas la torre iluminada. Con un poco de habilidad, conseguirás una de las mejores fotografías de tu viaje.

Una gran manera de comenzar la noche en Lisboa es comer algo en el Mercado da Ribeira, más concretamente en su espacio Time Out Market. Y es que el Mercado de Ribeira es el más popular de toda la ciudad, sobre todo por su gran oferta en pescado fresco. Hace unos pocos años, el edificio fue remodelado y, en parte, ocupado por una gran cantidad de puestos de comida, terrazas y locales en los que se desarrollan eventos culturales.

El Time Out Market, nombre que ha recibido este espacio, está ubicado en una de las zonas de moda de la ciudad, el Cais do Sodré, muy cerca del centro de la misma. En sus puestos vas a poder encontrar muchos platos típicos de la gastronomía portuguesa.

Mi recomendación es que no dejes de probar alguna de las especialidades de bacalao que se sirven en sus puestos y, si puede ser, acompaña el plato con un buen vino luso. Como postre tienes a tu disposición algunos locales en los que sirven pasteles de Belém recién hechos.

Los que quieran disfrutar de noches de fiesta durante su estancia en Lisboa están de enhorabuena. El ocio nocturno en la capital lusa es abundante y es sencillo encontrar locales para cualquiera, sin importar el tipo de ambiente que le guste. Las zonas con más bares y discotecas están en Bairro Alto, Chiado y Cais do Sodré.

• Bairro Alto: en sus calles vas a encontrar un gran número de locales de todo tipo. Si prefieres un sitio tranquilo puedes optar por las terrazas de Largo de Camoes o la zona del mirador de Sao Pedro de Alcantara. Para un ambiente más movido y estudiantil es mejor acercarse a alguno de los bares con música en directo a las discotecas del barrio.
• Cais de Sodré: el ambiente en esta zona tiende a ser algo más tranquilo que en Barrio Alto. Sin embargo, no faltan clubes y discotecas en los que se escucha desde rock a música africana.
• Santa Apolónia/Jardim do Tabaco: bajando desde Alfama vas a encontrar una zona con varios restaurantes, además a alguna de las discotecas con más éxito de la ciudad. En concreto, en Santa Apolonia puedes intentar entrar en Lux, una discoteca que suele aparecer en los primeros lugares en los listados de este tipo de locales en toda Europa.

Si vas a pasar más de un día en Lisboa, tienes que explorar la noche de Lisboa, que está plagada de eventos culturales, sobre todo conciertos, representaciones teatrales y danza. Si quieres conocer la vida cultural de la ciudad deberías intentar acudir a alguno de sus teatros o auditorios.

La capital portuguesa cuenta con varios teatros. Algunos de ellos, como el Sao Carlos y el Doña María, son edificios históricos con una arquitectura que bien merece una pequeña visita, incluso si no vas a entrar a ver las obras. Ambos teatros ofrecen una buena oferta teatral durante todo el año. Su calendario de actuaciones mezcla las obras portuguesas con otras de autores internacionales. Aunque las representaciones son, evidentemente, en portugués, la experiencia es realmente interesante.

Si prefieres otro género artístico, quizás el más recomendable en la capital portuguesa sea la danza. El mejor lugar es, sin duda, el Teatro Camões, sede de la Compañía Nacional de Danza. El local se encuentra en el llamado Parque de las Naciones, muy cerca del Pabellón Atlántico (donde se celebran muchos conciertos) y el Casino de Lisboa.

Camino del Barrio Alto vas a encontrar una extraña estructura de hierro que parece salida de la nada. Se trata del elevador de Santa Justa, que comunica la Baixa con el barrio del Chiado. Es una de las cosas que tienes qué ver y qué hacer en Lisboa y te recomiendo que subas justo antes del anochecer.

Este elevador fue construido en estilo neogótico con una nada disimulada inspiración en otras construcciones de hierro del tipo de la Torre Eiffel. Tras recorrer sus 45 metros de altura se llega a una extensa terraza que ofrece unas vistas maravillosas del río, de la Baixa, de la plaza de Rossio y del castillo de San Jorge.

En esa terraza está instalada una cafetería por si quieres tomar algo mientras disfrutas de las vistas. Ten en cuenta que puedes encontrar colas para usar el elevador por la tarde, ya que muchos desean contemplar la puesta de sol y el encendido de la iluminación nocturna desde las alturas. Y si tras la subida te entra el apetito, puede ser un momento ideal para hacer un tour gastronómico por Lisboa.

Información práctica

• Horario: 07:30 a 21:00 (noviembre-abril) y 7:30 a 23:00 (mayo-octubre)
• Precio: cuenta unos 5,30 € ida y vuelta con la entrada al mirador incluida

Al escoger el alojamiento para un viaje siempre se tienen en cuenta diversos factores, como la zona en la que se prefiere dormir hasta el presupuesto. La capital lusa cuenta con una importante oferta hotelera, además de muchos apartamentos.

Un consejo a tener en cuenta es que, si vas en verano, temporada alta, deberías reservar tu habitación con bastante tiempo de antelación. En cuanto a las zonas, aquí te dejo algunas recomendaciones:

• Alfama: el barrio de Alfama se ha convertido en el favorito de muchos turistas para buscar un alojamiento. A su favor juega el encanto del barrio y la gran cantidad de apartamentos que hay en oferta. En su contra, los problemas de transporte que puedes encontrar para llegar a tu hotel.
• Plaza de Comercio: en los alrededores de esta plaza vas a encontrar varios hoteles bastante interesantes, aunque los precios son algo más elevados. La comunicación con el aeropuerto y otras zonas de la ciudad es bastante buena.
• Cercanías a la Avenida da Liberdade: en los alrededores de esta avenida, entre la plaza Marqués de Pombal hasta Rossio, también vas a encontrar varios lugares muy interesantes para dormir.
• La Baixa: esta zona comprende desde Rossio hasta la Plaza del Comercio y se distingue por contar con una buena oferta de hostales y hoteles. Se encuentra, además, cerca de la mayoría de los puntos de interés de la ciudad.
• Chiado y el Bairro Alto: la ventaja de estos barrios para alojarse es la presencia de numerosas tiendas, cafés históricos y lo mejor de la vida nocturna de la ciudad. Eso sí, el ruido en algunas calles puede ser molesto.

Durante el día no cabe duda de que el tranvía será el mejor medio para moverte entre los lugares más turísticos, sobre todo las conocidas líneas 28 y 15. La primera recorre todo el centro histórico y pasa por casi todos los monumentos imprescindibles de la ciudad. La línea 15, por su parte, es la opción perfecta si quieres ir al barrio de Belém por tu cuenta, ya que tiene como destino la zona oeste de la capital.

El principal problema de estas líneas es que apenas vas a poder utilizarlas por la noche. Así, el tranvía 28 deja de circular sobre las 21:15 entre semana y a las 22:30 los sábados y los domingos. El 15, por su parte, te deja algo más de margen: lunes a sábados funciona de 5:45 a 1:00 y domingos y festivos de 6:05 a 1:00.

En cuanto a los autobuses urbanos se puede decir que son más útiles por la noche, ya que existen varias líneas que comienzan a circular sobre las 23:45 h. Vas a encontrar dos tipos de bus nocturno: la Rede da Madrugada y los Night Buses. Estos últimos son gratuitos y solo funcionan los fines de semana. Ten en cuenta, además, que con la Lisboa Card podrás ahorrar tiempo y dinero a la hora de visitar y desplazarte por la ciudad.